RAÍCES DE TÍO PUJIO
Conocer el lugar donde estamos, el orígen de sus habitantes y de sus vicisitudes, asumir conciencia de nuestra identidad, para que la memoria de nuestro pueblo quede expuesta y nos ayude a comprender la importancia de estar vivos y comprometernos a legar actos virtuosos; desde Tío Pujio, respetuosamente a todos los jóvenes, de edad o de corazón.
TÍO PUJIO Y LA CULTURA QUE LE DIO IDENTIDAD
La posibilidad de rescatar los hechos históricos que forman parte de nuestra identidad y cultura, es una obligación que no podemos obviar los gobernantes.
Es que el repaso de los hechos que nos fueron conformando como comunidad, no son otra cosa que bucear en el pasado para encontrar respuestas del presente. El trabajo investigativo de Gustavo Fabián plasmado en esta obra literaria, se convierte en un minucioso seguimientos de los primeros asentamientos que existieron por nuestra geografía y también de lo que fue transcurriendo con el paso del tiempo. En los siguientes textos, se pueden transitar las costumbres de los aborígenes, de los pobladores originales de esta tierra, de una identificación que parece ser devorada por los tiempos. El autor tiene un doble mérito, el tomar como propio este suelo y ahonda en él desde lo sociológico y demostrar profundos conocimientos en la materia. Esta sección, sin duda, habrá de convertirse en un material de consulta permanente para los tiopujienses, a la hora de conocer el porqué somos como somos.
Este sector ofrece información elemental acerca de las sociedades que se sucedieron en nuestra región que ya se denominaba Tío Pujio, con algunas variantes fonéticas a través de los tiempos, que ya se encontraba ocupada por asentamientos humanos cuando hace poco mas de cuatro siglos llegaron los primeros conquistadores y establecieron sociedades mixtas en sus modelos culturales que hicieron surgir a los primeros criollos que iniciaron nuestra sencilla historia de pago chico.
La antigua posta “del Tío Pujio” vio pasar ante sí a casi todos los hombres que participaron en el desarrollo de nuestra Nación, muda e irrelevante, pero imprescindible porque aquí había agua potable, leña, comida y se podía dormir con tranquilidad puesto que se estaba a resguardo del salvaje; la famosa estancia que ocupaba la ribera del río proveyó de caballos y arreos a los ejércitos de la contienda nacional; después apareció el tren portando nuevas culturas que en poco tiempo todo lo transformaron: unos cuantos ranchos con sus gauchos se opacaron definitivamente dando lugar al avance humano; borraron los montes aledaños quedando praderas; las cosechas se cargaba e iban lejos; los dineros venían; edificaron iglesia y el flamante gobierno emitió decretos.
Más tarde se construyó la ruta y otra vez se vio el ir y venir de vehículos veloces portadores de cambios que sumados a los medios masivos de comunicación pasaron rápidamente al olvido la vida tradicional; las personas se interrelacionan cada vez menos y vamos hacia la sociedad serial, etapa desconocida e inquietante.